Leffe Brune es una cerveza de abadía. La malta tostada oscura le otorga a la cerveza su color oscuro y café, y su sabor ligeramente dulce. Su receta data de los años 1200, cuando los monjes en Dinant, Bélgica (en la Abadía Leffe), comenzaron a purificar el agua convirtiéndola en cerveza, en un intento por evitar las epidemias de enfermedades transmitidas por el agua. El resultado fue una cerveza oscura, de gran cuerpo; y los aldeanos de Dinant y los peregrinos que pasaban por ahí fueron muy felices al compartirla.